Es uno de nuestros principios, porque somos responsables con tu piel y con el medio ambiente. Aquí te contamos en qué consiste nuestra propuesta de cosmética.
La cosmética natural se elabora con ingredientes naturales de origen vegetal que respetan las estructuras de la piel, aportando todos los beneficios de plantas y flores ampliamente valoradas por sus propiedades medicinales. Además, en la mayoría de los casos los ingredientes provienen de la agricultura ecológica certificada, asegurando así la calidad y ausencia de pesticidas en la materia prima. Este tipo de cosmética logra demostrar mayor eficacia y resultados gracias a su capacidad de estimular las funciones dérmicas naturales, logrando así una mejora en sus funciones, restaurando el equilibrio natural de la piel y fortaleciendo sus estructuras.
La fabricación de cosmética natural es más costosa pues se realiza con materia prima certificada y mediante procesos que no introducen sustancias sintéticas de baja gama. No obstante, su eficacia y concentración permiten un uso menor del producto que revierte directamente en el ahorro económico a medio y largo plazo, hidratando en profundidad. La cosmética natural llega hasta las capas más profundas de la piel permitiendo la oxigenación de los poros (sin usar derivados del petróleo que terminan en el torrente sanguíneo). Generan menos alergias y dermopatías
Los aceites vegetales y esenciales utilizados en la cosmética natural permiten elaborar emulsiones más afines a la piel sin la necesidad de añadir perfumes artificiales. Todo ello proporciona una mayor afinidad cutánea; esto es, mayor hidratación con menor riesgo de alergias. Se adaptan mejor a la piel. Los componentes de la cosmética natural proceden de la naturaleza y poseen estructuras celulares parecidas a las de nuestra epidermis, motivo por el cual nuestro organismo puede metabolizarlos y absorber todos sus beneficios y cualidades. Es saludable y no tiene efectos secundarios.
Puesto que la cosmética natural no incluye sustancias químicas sintéticas ello permite un proceso de fabricación que no genera residuos químicos ni perjudiciales para el medio ambiente. Asimismo, apoya la sostenibilidad del planeta haciendo uso de materia prima que proviene de la agricultura, la energía y el envasado ecológicos, respetando a los animales.
En cosmética natural no se hacen pruebas con animales, los productos se testean con exámenes dermatológicas sobre personas que se han prestado voluntarias.
